jueves, 19 de diciembre de 2013

Un partido de actitud


Este fin de semana se nos presentaba un partido que podríamos calificar como poco de extraño. Jugábamos contra el último clasificado de la categoría, el Artaromo, un rival que viene de encajar goleada tras goleada y que aún no ha puntuado.

Hago un pequeño apunte diciendo que jugamos el domingo a las 18:00h., algo que en estas categorías creo que no debería de estar permitido, recordemos que no somos profesionales.

El peligro de este partido no residía en la victoria o derrota -siempre desde el respeto a todos por igual, pero a priori partíamos con ventaja- si no, en la actitud del equipo a nivel de sentirse superiores al rival y menospreciarles.

En el vestuario, antes de salir a calentar hablamos de todo esto. Este año hemos tenido esa sensación de ser superiores al resto y nos ha costado varios sustos. No quería que eso volviese a suceder y hablamos de concentración y de respetar al máximo al rival.

Sin duda fue lo que pasó en el campo. Fuimos superiores a ellos en juego pero sobre todo en actitud, el trabajo fue perfecto y todos y cada uno de los jugadores mantuvieron la concentración hasta el final.

El resultado es anecdótico, 0-14. Lo importante es que supimos afrontar el partido como debíamos, porque el mayor respeto para un rival y para uno mismo es esforzarse siempre al máximo. 

Sin duda salí contento del campo, me daba igual el numero de goles, solo quería que los jugadores respondieran y así fue. En ese momento me sentí orgulloso del grupo tenemos este año.

lunes, 9 de diciembre de 2013

Primera gran lección


Este fin de semana jugamos contra El Colegio Alemán y sufrimos nuestra primera derrota de la temporada.

El partido comenzó bien con un 2-0 a nuestro favor, pero a partir de ahí todo se fue torciendo.

El rival nos planteó un partido intenso y con mucho ritmo, lo cual nos viene bien a nuestro juego, pero cuando el fondo de banquillo es tan escaso en numero de jugadores, estas cosas se pagan.

Sin duda no se puede mantener el ritmo alto todo el partido y esto nos pasó mucha factura.

A falta de 8 minutos perdíamos 2-5, hicimos portero-jugador y nos llegamos a poner 4-5 y con una clara tendencia positiva, pero este sistema es un arma de doble filo y un gol de ellos en una transición nos terminó de hundir. 4 -6.

El partido acumuló tensión, entre nosotros y contra el árbitro, que sin duda no tuvo su mejor día. Al final fue un golpe duro pero el equipo en el vestuario reaccionó bien, se dio cuenta de que nos sentíamos superiores a cualquier equipo y eso al final solo te cuesta derrotas.

En este campeonato y con nuestro nivel, cualquier equipo nos puede causar problemas y nos tenemos que tomar cada partido como una final, como un único partido en el que el objetivo debe ser sacar los tres puntos, sin pensar en qué rival tenemos enfrente. Es nuestro gran problema este año a nivel de actitud, no consideramos igual a todos los rivales y tenemos un sentimiento de superioridad sobre algunos de ellos. Sin duda nos crea problemas y no nos deja progresar bien.  

Con este partido parece que hemos vuelto a nuestra realidad, a la realidad de que somos un equipo humilde, que tenemos muchísimo que aprender y que solamente trabajando muy muy duro podremos seguir progresando. Somos el Kukuiaga, con sus virtudes pero también con sus defectos, y tenemos que tener eso muy claro porque si nos sentimos superiores a los demás nos daremos un golpe superior al de los demás.

La parte positiva de todo esto es que el equipo, tras el partido, reaccionó bien asumiendo sus errores y repitiendo sin duda que lo importante ahora es trabajar mucho más duro. 

Veremos como vamos respondiendo esta semana, jugamos contra el último clasificado y la sombra de los aires de grandeza se puede hacer más grande aún. Sin duda eso nos hará sufrir, igual no contra ellos pero si en siguientes partidos.

El esfuerzo no se negocia. Ni tolero el conformismo. La pasividad está alejada de mí".
Diego Simeone