2º capítulo de nuestra aventura

El sábado volvimos a disputar otro amistoso, el segundo desde que comenzó este nuevo reto. El resultado, como en el anterior, fue de derrota, 0-2 contra el Otxartabe. 

Con dos partidos perdidos de dos disputados cualquier persona aseguraría que esta siendo un mal comienzo de pretemporada y que este proyecto no ha empezado bien. Quizá sea por la ilusión que tengo en el mismo, o porque desde dentro se ve todo un poco diferente, pero mis sensaciones son que día a día este equipo mejora y a grandes pasos. Hemos compartido seis entrenamientos juntos esta temporada y ya estamos empezando a ser competitivos en los partidos, a dar la cara durante los 50 minutos y a empezar a jugar a fútbol sala. Todo esto, sin duda, es por las inmensas ganas que tienen los jugadores.

El año pasado les dolió mucho y por lo que me dicen les marcó bastante. Fue un año muy duro y ahora con un curso nuevo por empezar, todo son ganas e ilusión por cambiar las cosas. Si seguimos así todo el lado bueno de este deporte nos llegará.

Un único punto negro manchó el partido para mí y fue que quizás los minutos no se repartieron equitativamente. Para mí, como entrenador, no es de agrado que nadie juegue menos que nadie, de verdad. Partimos de la base que solo pueden estar cinco en el campo y me encantaría que todos jugasen lo mismo, pero para eso hay que trabajar más en los entrenos y que no se produzca tanta diferencia de una gente a otra. Claro que la calidad influye y todos no tenemos la misma, pero hay cosas que se suplen con otras y hay que esforzarse más.

En conclusión, creo que nuestro proyecto ha nacido con buen pie, esperemos que siga así.